Perfecto Herrera









martes, 27 de octubre de 2009

LAS PALABRAS


LAS PALABRAS




Brevemente te detienes en la palabra.
Es la palabra un pentagrama
Por donde se van resbalando
Las aguas misteriosas, las hojas
Que escaparon de repente
De la rama alta, los sueños
Que despereza un olvido.

¡ La palabra, tremendamente la palabra!.

La palabra,
Con un blanco de magnolia,
Es un mantel de hilo manchado
Por los colores del mundo.
Se llena tu boca de palabras,
Y, cuando las posas sobre el papel
(blanco sobre blanco), ya se sumergen
Y desangran miles de cosmos en el corazón
Del que lee y mira tus ojos.

¡Palabras! ¡Ojalá, nunca falten a tu mesa
las palabras!.

jueves, 22 de octubre de 2009

EL POEMA QUE NUNCA RECIBIRAS


EL POEMA QUE NUNCA RECIBIRAS



NI tus ojos lejanos.
Ni ese paso extraño con que andas.
Ni esos dibujos tenues
A que se dan tus manos.
Ni esas ojeras inciertas
En tu rostro.
Ni aquella noche amorosa
Que no hemos de compartir.
Ni tus palabras, pocas
Y temerosas.
Otra oscura magia me incita
A escribir una nueva página
que trata de nombrarte.
Si supieras
Los amargos paisajes
A que da tu ausencia.…

martes, 20 de octubre de 2009

CAMPEONATO DE ANDALUCIA DE ESGRIMA


Quien quiera saber algo de esgrima, adjunto una noticia sobre ello.


EL NOBEL PABLO NERUDA


Un 21 de octubre se le concedió el premio Nobel a Pablo Neruda, el noveno en habla hispana. Mañana se cumplen años de ello, y veo muy conveniente recordarlo, porque su obra es inmensa, tan inmensa como la del autor de "Hojas de hierba", el otro gran americano. En el caso de Neruda, el honor es para esta amada lengua, tan denostada por algunos, pero tan util para tantos que sentimos con ella.

En este blogs, que ha nacido gracias a un viento extremeño que me llegó por correo electronico, quiero recoger algo que este gran poeta escribió sobre nuestra lengua.

LA PALABRA
...Todo lo que usted quiera, sí señor, pero son las palabras las que cantan, las que suben y bajan...
Me prosterno ante ellas... Las amo, las adhiero, las persigo, las muerdo, las derrito... Amo tanto las palabras... Las inesperadas... Las que glotonamente se esperan, se acechan, hasta que de pronto caen...Vocablos amados.. Brillan como piedras de colores, saltan como platinados peces. son espuma, hilo, metal, rocío... Persigo algunas palabras... Son tan hermosas que las quiero poner todas en mi poema... Las agarro al vuelo, cuando van zumbando, y las atrapo, las limpio, las pelo, me preparo frente al plato, las siento cristalinas, vibrantes. ebúrneas, vegetales, aceitosas, como frutas, como algas, como ágatas, como aceitunas... Y entonces las revuelvo, las agito, me las bebo, me las zampo, las trituro, las emperejilo, las liberto... Las dejo como estalactitas en mi poema, como pedacitos de madera bruñida, como carbón, como restos de naufragio, regalos de la ola... Todo está en la palabra... Una idea entera se cambia porque una palabra se trasladó de sitio, o porque otra se sentó como una reinita adentro de una frase que no la esperaba y que le obedeció... Tienen sombra, transparencia, peso, plumas, pelos, tienen de todo lo que se les fue agregando de tanto rodar por el río, de tanto transmigrar de patria, de tanto ser raíces... Son antiquísimas y recentísimas... Viven en el féretro escondido y en la flor apenas comenzada... Qué buen idioma el mío, qué buena lengua heredamos de los conquistadores torvos... Estos andaban a zancadas por las tremendas cordilleras, por las Américas encrespadas, buscando patatas, butifarras, frijolitos, tabaco negro, oro, maíz, huevos fritos, con aquel apetito voraz que nunca más se ha visto en el mundo... Todo se lo tragaban, con religiones, pirámides, tribus, idolatrías iguales a las que ellos traían en sus grandes bolsas...
Por donde pasaban quedaba arrasada la tierra... Pero a los bárbaros se les caían de las botas, de las barbas, de los yelmos, de las herraduras, como piedrecitas, las palabras luminosas que se quedaron aquí resplandecientes... el idioma. Salimos perdiendo... Salimos ganando... Se llevaron el oro y nos dejaron el oro... Se lo llevaron todo y nos dejaron todo... Nos dejaron las palabras.

lunes, 19 de octubre de 2009

LA NOSTALGIA DE LUZBEL


La nostalgia de Luzbel


Hay una nostalgia en mí,
Una nostalgia de la luz, de lo lumínico,
La luz que ilumina el mundo.

Todo, en aljamía, atestigua
Que mi propensión a la luminosidad
Es un arcano conocimiento:
Me sé dueño de mi propia oscuridad.

Ante la luz inmatura,
Evanescente, diáfana,
Que hace fácil agua y roca;
Ante la cenital luz
Cernida por los árboles,
Tan amada para las almas,
Tan clara para los inocentes,
Yo, piedra oscura,
Que digo piedra, carbón puro,
Rebeldía llevada al infinito soy.

Yo, que tanto amo la luz,
-a ella debo mi nombre-
Soy un agujero negro.
En mí entenebrecen las estrellas.

La oscuridad absoluta
Es la cofa desde donde gobierno
Mi libre albedrío.

No es infierno ni es morada,
Es libertad suprema.

Amo la luz
Pero no su línea recta,
Amo su esplendor
Pero no su tiranía.

Amante extremo del día,
Reino en la noche oscura
Por decisión propia.

Mas la nostalgia me traiciona
Y hay a veces destellos en mis alas
Y fuego en mi mente
Que encienden una hoguera..
...pero …solo de nostalgia.

viernes, 16 de octubre de 2009


26


Cuando pase el tiempo
te contaré una historia:
no fui yo, fue mi sombra,
mi sombra recostada,
la que se vió inundar.
Mas ancha, mas extensa.
Como si hubiese sido,
siendo día, noche oscura.
Su propio estremecimiento
abrió mis ojos, mas nada:
el mar centelleaba. Luz,
pura luz había.

Hoy lo sé: fue tu sombra,
tu sombra que pasaba,
e inundo la mía.

El esplendor del desamparo
















EL ESPLENDOR DEL DESAMPARO


La cucharilla de café
- única compañía-
remueve el poso
de la tristeza.

Cerraste la puerta y
Se fue la mañana.
El cuadro de la casa
Se quedó fijo, ladeado
En su propia soledad.

Ya estoy fuera de ti,
Expulsado, perdido,
Olvidado de tus ojos.

El poso del café
Augura, en su noche
De amor sombrío,
El esplendor del desamparo.