La esperanza
En la hoja caída del álamo
confío la esperanza.
¡Tal es¡
El viento la arrastra inmisericorde.
Su destino, incierto es.
Más, sueño con tornar al árbol,
a la copa palpitante de las hojas,
al aire alzado al sideral espacio
de los amores íntimos,
a las lastimaduras delicadas
de sus lineales nervaduras,
como si fuesen tenues barcas
de ilusiones perdidas.
La esperanza, la espera
de las ingrávidas estrellas
enraizando en la oscuridad.