sábado, 18 de junio de 2011
FRIALDAD
FRIALDAD
¿Cómo el amor pasado se puede olvidar?
¿Ya no se quiere a sí?
Gran lástima sería
si la palabra no luciese
para acertar la luminaria
de esos fuegos extintos,
con que encontrar el rescoldo.
La suavidad de la caricia se extraña
de su propia frialdad.
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Cuando llega el desamor ninguna luz alumbra lo que se llamó un día sentimiento.
ResponderEliminarLa sombra esculpe su escorzo de penumbras.
Besos, Perfecto.
Tú lo has dicho, a veces el amor deja de quererse y se vuelve frío e inhóspito. Buena entrada.
ResponderEliminarBesos, Perfecto.
Ah¡,la caricia puesta en la glacialidad del desamor. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarEl amor debe avivarse continuamente, de lo contrario se corre el riesgo de que se reduzca a rescoldos y se quede finalmente en pura y triste frialdad.
ResponderEliminarSaludos poeta.
Ciertamente recordamos. Los sentimientos se visten en la memoria de otros aromas y se desvisten de aristas dolorosas; pero siempre nos acompañan.
ResponderEliminarSalud
El amor se debe cuidar a diario si decides tenerlo, de lo contrario tarde o temprano termina y cabe la posibilidad de que sólo exista hielo.
ResponderEliminarAbrazos Perfecto
Hemos coincidido, un poco, en el título; no así en los versos.
ResponderEliminarEstos tuyos se aquietan en el corazón.
Es siempre un placer, mi querido amigo.
Gracias por compartir tu hermosa manera de sentir.
Un abrazo
Ío
La Zarzamora
ResponderEliminarPero es realmente una lástima: como todo lo bello que se aleja.
Besos, Eva.
Duna
ResponderEliminarGracias, amiga Duna, por este comentario. Hace algún tiempo que no nos frecuentamos, aunque tengo que decirte, que siempre procuro leerte. Y a veces no sabemos valorar lo que se estima un comentario. Procuraré dejar mas a continuo alguno mío, para que sepas que siempre estoy presente, y aprecio realmente tu quehacer poetico.
Besos, amiga mía.
Carlos Augusto Pereyra Martínez
ResponderEliminarHola Carlos. La frialdad que aún presiente lo que ardió.
Un abrazo.
Poetas argáricos
ResponderEliminarComo el amor mismo, mi querido amigo. Tal suele ser siempre esa experiencia.
Un abrazo.
Julio
ResponderEliminarForman ya parte de nuestra vida.
Salud
Estefanía Martín Sebaquevas
ResponderEliminarAlguien dijo que el amor es una delicada flor, y aunque pueda parecer una cursilería, así me lo parece.
Un abrazo, Estefanía.
Ío
ResponderEliminarEl placer es mío, querida Señora.
Un abrazo