POEMA 35

35


Cuando pase el tiempo
tal vez descubras
que nunca encontrarás las quimeras,
como nunca encontraste debajo de la piedra
el duende, el hada, la fantástica aparición.
Existencia y no existencia:
todo habrá sido cuento o sueño,
vigilia o repentino despertar.

Mas que importa si nadie tiene ojos
para verte cabalgar las mariposas,
o ver como te asustas con los ojos ardientes
que te miran, tú dentro del fuego
en juego con las chispas
y resplandores de las llamas.
¡Total, porque solo era un gato soñoliento¡.

Nada importa si no hay driadas,
si los sátiros solo son los viejitos del barrio,
si pulgarcito solo es un prototipo psicológico
que, en siendo mayor, rapta a la cenicienta.
Realmente nada importará,
si los niños todavía sueñan
y los adultos traducen en niño, niñean,
y van poniendo amor aterido
no solo en las rosas, sino en todo,
todo lo humanizadamente posible
hasta vivir mayormente de la fantasía
que cada día se hace carne de cuento,
historia de floresta,
broche con que se adorna
el declinar de la noche.