Fue salir de tu casa
Y encontrar la luz del crepúsculo
Incendiada de pájaros, de arboledas;
Sentir convulsamente
El rodar del planeta
Con un gigantesco alborozo
Columpiándose en el mar, en el horizonte;
tuve la sensación de haber apresado
entre los dedos un átomo, una caricia:
mis manos llevaban tu ardor trémulo,
tu perfume, tu aliento,…
Y vi el mar terso como tu piel,
Donde los peces jugaban con mi corazón,
Acariciaban mi torso y mis ingles,
Y se tornaba celeste como yo.
Fue salir de tu casa
Y recobrar la vista y el habla,
La sangre y el aliento,
El vigor corporal necesario
Para limpiamente saltar
Una montaña, un océano, un continente,
Para romper con mi voz
El silencio del bosque
Y ahuyentar a todas sus criaturas,
Para desviar el curso de los ríos,
La orbita de las estrellas,..
…De inmediato quise volver a tu lecho,
a la febril pujanza del amor,
a tu vientre, a tus piernas, a tu boca;
derramarme sobre tus jazmines y azucenas;
convertirme en fuego, nube, aurora, pájaro, cristal puro,..
..abandonarme por fin sobre ti,
sentir el latido de tu corazón
como siente la barca el pulso del mar
que le mece y le sustenta.
Regresar a ti quise.
Agradezco tu paso por poetas de hoy, es muy grato cada nueva voz que vamos encontrando y que es un suma y sigue en la poesía
ResponderEliminaraplaudo tus letras compañero
.
Agradezco igualmente tu visita por esta humilde casa.
ResponderEliminarQue la poesia nos reuna y nos encuentre.
Un cordial saludo
Un regreso lleno de tanto amor... lindo!!!
ResponderEliminarun beso
El amor que nos salve, y el regreso sempiterno.
ResponderEliminarUn abrazo, Siab-MiprincesaAzul.